¿Qué es un High Side y por qué deberías tenerle respeto?

Hace un tiempo, charlando con un grupo de amigos moteros, salió el tema del high side. Algunos lo conocían de oídas, otros lo habían sufrido (y no precisamente con gusto), y varios no sabían muy bien de qué se trataba. Así que me animé a escribir esto, no como experto, sino como alguien que lleva años disfrutando del mundo de las dos ruedas y ha aprendido lo importante que es entender este tipo de situaciones.

Para explicarlo de forma sencilla: un high side es esa caída violenta que ocurre cuando la rueda trasera de la moto pierde agarre, empieza a deslizarse, y de repente recupera tracción… pero lo hace de manera tan brusca que te lanza por los aires. Literalmente. Sales despedido por encima de la moto, muchas veces sin tiempo para hacer nada. No tiene nada que ver con las típicas caídas donde la moto simplemente se desliza hacia el suelo (low side). El high side es más peligroso porque es inesperado, agresivo y suele acabar con el piloto golpeando con fuerza contra el suelo o, peor aún, contra un coche, una farola o cualquier otro obstáculo. No hay más que ver la cantidad de veces que ocurre este tipo de caídas en competiciones como Moto GP, y eso que son pilotos profesionales... Recuerdo una caída de este estilo muy fuerte por parte de Jorge Martín a principios de 2025, cuando empezaba a rodar con la Aprillia.

Lo que lo hace tan traicionero es que sucede en un instante. Por ejemplo, vas saliendo de una curva, abres gas con un poco de alegría, la rueda trasera empieza a derrapar y, de repente, vuelve a agarrar. Ese agarre repentino es lo que desestabiliza toda la moto y te lanza por encima. También puede pasar si estás frenando con el freno trasero, este se bloquea y la rueda patina; si lo sueltas de golpe, la rueda vuelve a agarrar y... adiós. Aunque en circuito es algo bastante conocido, en la calle también puede pasar, sobre todo si circulas por asfalto sucio, con aceite, pintura vial mojada, hojas, gravilla o cualquier otra superficie con poca adherencia.

¿Y lo peor? En la calle no hay escapatorias, ni zonas de grava, ni comisarios. Un high side en ciudad o en carretera puede acabar contigo en mitad del tráfico, contra un bordillo, una señal o incluso en el carril contrario. Por eso, aunque no vayas a toda velocidad o no te creas piloto, es fundamental tener esto en cuenta.

La clave para evitarlo está en la suavidad. Suavidad con el gas, con los frenos, y siempre atento al estado del asfalto. Evita acelerar con fuerza mientras la moto aún está inclinada, controla bien el freno trasero y no hagas movimientos bruscos. A veces se nos olvida que una moto, por muy moderna o potente que sea, sigue dependiendo de un par de pequeñas superficies de goma tocando el suelo. Y ese agarre puede desaparecer y volver en cuestión de milésimas.

En resumen, el high side no es algo que solo le pase a los que corren en circuito. Puede pasarte a ti, saliendo de una rotonda, esquivando a un coche, o simplemente confiándote en una curva cualquiera. Entenderlo y respetarlo no significa tener miedo, significa ser consciente. Porque al final del día, todos queremos lo mismo: llegar enteros a casa, disfrutar del trayecto y seguir rodando.

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